Filipenses 2:13 (NVI) “…pues Dios es quien produce en ustedes tanto el querer como el hacer para que se cumpla su buena voluntad.”
Filipenses 3:13(NVI) “Hermanos, no pienso que yo mismo lo haya logrado ya. Más bien, una cosa hago: olvidando lo que queda atrás y esforzándome por alcanzar lo que está delante…”
Einstein dijo: “El hombre que considera que su vida carece de significado, no es solamente infeliz, sino indigno de vivir.”
El escritor chino, Watchman Nee, en su libro El Hombre Espiritual, escribe: “La voluntad del hombre es el órgano de que se dispone para hacer decisiones. La voluntad del hombre puede ser considerada como su verdadero yo, porque verdaderamente le representa. Nuestra voluntad comunica lo que queremos. La verdadera religión no tiene por objetivo la emoción o la razón, sino que intenta impartir vida al espíritu del hombre y llevar su voluntad a que se entregue por completo a la voluntad de Dios.”
Dios nos creó con una voluntad libre, la que también tiene que ser salvada. En su posición caída, el hombre es carnal. Lo que surge de la carne no puede agradar a Dios.
Nee escribe: “Una mente puede ser desviada, y la emoción puede ser desordenada. Pero la voluntad no puede permitirse estar equivocada… y no se realiza la voluntad de Dios.”
¿Qué es, cómo funciona?
¿Cuál es el músculo que necesitamos para ir al gimnasio, para estudiar un idioma, para sacar adelante una familia?
El músculo de la voluntad.
Entrenarla, descubrirla, y usarla es lo que nos llevará a todo logro en nuestra vida.
La voluntad es la esencia del ser humano, es la herramienta dentro del alma (que son tres, voluntad, emociones e intelecto).
Tenemos que reconocer la voluntad y darle prioridad en nuestra vida.
Con la voluntad yo existo, yo soy, yo hago, yo crezco.
Es demasiado fácil olvidarnos de la importancia de la voluntad. Pero es la función que dirige y regula nuestra vida, nos pone en equilibrio, nos lleva a usar la mente, a tener una vida espiritual. Con una voluntad bien desarrollada desplegamos nuestras vidas. La voluntad es quien actúa sobre las otras funciones psicológicas.
Yo existo por mi voluntad, no por mis intenciones, mis ideas…
Hay cuatro aspectos de la voluntad a desarrollar:
- La voluntad fuerte, firme.
- La voluntad perseverante.
- La voluntad sabia, espiritual, que analiza los mejores resultados con el menor desgaste.
- La voluntad buena, que nos lleva a buen puerto. Hay quienes desarrollan una voluntad mala y destructiva.
En todo acto de voluntad hay una expresión de conflicto y una lucha, y la voluntad tiene que resolver este conflicto.
CUALIDADES DE LA VOLUNTAD
- Disciplina. ¿Por qué? Porque la voluntad controla nuestras otras funciones psicológicas, físicas y espirituales. Sin voluntad, no hacemos nada. Controlar es orientar la voluntad hacia donde queremos. Con la disciplina y el control alcanzaremos nuestro crecimiento. Sin disciplina caemos en la gratificación superficial.
- Atención. ¿En qué se está enfocando nuestra voluntad? ¿Qué ocupa su atención? Donde ocupe su atención, para ese lado irá la voluntad. Lo que no se presta atención, no hay función de la voluntad. O sea, escribe y analiza lo que debieras estar prestando atención en tu vida, en cada área.
- Determinación. Aquí es donde nos quedamos mucho por falta de “fuerza de voluntad”. No hay que confundir impulso con voluntad. Uno puede ser impulsivo, pero no tener gobierno de su voluntad.
- Perseverancia, paciencia. Es la voluntad a largo plazo, que espera, que sigue luchando. La paciencia es un ejercicio de la voluntad. Dejamos de hacer muchas cosas a causa de la impaciencia.
- Valentía. Para usar la voluntad hay que ser valientes, correr riesgos, salir del lugar cómodo, intentar lo nuevo.
- Organización. Nuestros cuerpos están “organizados” en una función maravillosa, la unidad por diversidad; así también la voluntad. En la voluntad aprendemos a organizar nuestras prioridades, poner tiempos y límites a nuestros proyectos y sueños,
Ejercicio: PIRÁMIDE DE PRIORIDADES
Anota las 10-15 prioridades en tu vida hoy, y luego indica cuáles son las 5 principales, y escribe tus objetivos y decisiones que tomarás en estas 5 áreas. (Sugerencia: lo ideal es tener prioridades en cada área de tu vida como salud, trabajo, capacitación, familia, matrimonio, emociones, etc.)
La voluntad es un músculo que hay que ejercitar
El amor, ¿es una emoción o una disciplina? Se puede amar emocionalmente, pero el amor maduro es un ejercicio de la voluntad buena.
La voluntad se puede ejercitar a través de una disciplina física. Un deporte, una carrera, un objetivo. Cuanto más se ejercita la voluntad, más ágil de hace. Se ejercita en las disciplinas diarias rutinarias y aburridas.
La voluntad se ejercita cuando nos alineamos con nuestras emociones, impulsos, e imaginación.
Leyes psicológicas:
- Tendemos a actuar sobre lo que abunde en nuestra mente. Mateo 15:11(NTV) “Lo que entra por la boca no es lo que los contamina; ustedes se contaminan por las palabras que salen de la boca.” Por ej. Tendemos como seres humanos a ser básicamente egoístas. Necesitamos gobernar nuestro egoísmo. Se elimina con su contrario, el amor, la generosidad, la empatía.
- Las emociones y sentimientos actúan sobre nuestra voluntad. Por ejemplo, si siempre estoy añorando algo que otra persona tiene (envidia) nos afectará para desalentarnos. La tristeza, el desánimo, el resentimiento, actuará sobre mi voluntad, y puede tirar abajo mis buenas intenciones.
- Nuestra atención define hacia dónde se dirige nuestra voluntad. Lo que ocupa nuestra atención es lo que ocupa nuestra vida.
- Al quitar la atención sobre algo, también le quitamos su poder.
- Para cambiar un (mal) hábito, es necesario incorporar otro (bueno).
- Nuestros deseos e impulsos más escondidos tienden a expresarse de alguna manera.
- Podemos transformar y encauzar nuestra voluntad hacia lo superior y lo mejor. Ej. Con la ira, el resentimiento, podemos transformarlo en algo útil.
CUÁLES SON LOS PASOS PARA EJERCER VOLUNTAD
- Definir propósito o meta, se evalúa, se tiene la intención. Se define el valor, la importancia. Somos lo que queremos ser, pero tenemos que organizarnos para hacerlo. Mantenernos en prioridades para no distraernos en cosas secundarias.
- Hay que analizar, organizar, prever, anticipar. Analizo mis motivaciones. ¿Es por miedo, es por mis padres, es porque realmente quiero? Se consulta con otros, se conversa, se pregunta.
- Decisión. Se elige una actividad y se descartan otras. Nos disciplinamos hacia la decisión. Al decidir, prefiero una acción por sobre otra. Decidir viene de la palabra “cortar”, es un sacrificio, una renuncia.
- Afirmación. “Voy a estudiar ingeniería.” “Voy a buscar trabajo.” “Yo puedo hacerlo.” Soy capaz.” “Lo voy a lograr.”
- Planificación y programación. Mucha gente vive sin un plan, vive al día. Acá hay que tener en claro lo que se quiere. Tiene que ser un plan flexible ante los imprevistos u obstáculos, pero firme.
- Dirección. ¿Hacia dónde vamos, qué queremos lograr?
La voluntad crece con su buen ejercicio y práctica disciplinada en la dirección correcta.
Así aumentarás tu potencial, llegarás más lejos en tus objetivos, y vivirás una vida más rica y ordenada.